20 enero, 2006

El código de la Bocina

Hace ya unos días que no os cuento nada de este interesante país, hoy hablaremos de conducción temeraria. Antes de llegar a India, todo el mundo me había dicho que lo peor de lo peor de Delhi es cómo conducen esta gente. Es la filosofía del desengaño: cuando alguien te dice que algo será tanto-tanto-tanto, al final no te parece que lo sea. Pues cuando llegué a Delhi, vale, conducen un poco como locos, pero tampoco es taaaaannnn terrorífico. Lo único que me pone el corazón en un puño es cuando nuestro conductor cruza una semi-autovía de 3 carriles en vertical para incorporarse al sentido contrario. Bueno, será que no me dejo impresionar? Jaja. Pero lo que sí me produce curiosidad es la organización en la carretera. Este es un país sin aceras. Y de ahí se derivan parte del caos circulatorio. La gente anda por las autovías (no tienen autopistas) y con 12 millones de personas en una ciudad, hay MUCHA gente andando por la carretera. Y luego están las bicis, y los rilshaws de bici, las motos, y los moto-taxis (una motoneta con techo, en donde he visto hasta 8 personas metidas), los coches y los autobuses, entre algunos camiones de mercancías. Cómo no puede haber caos?? Lo bueno es que han desarrollado un curioso sistema de avisos y permisos basados en la bocina y el uso de las luces. Todo el mundo comenta que conducir aquí requiere tocar mucho la bocina. No es así. Requiere conocer el código de conducta en la carretera. Como lingüista freaky que soy, estoy intentando descifrar el código de la bocina. Ya os contaré si lo consigo!

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