19 diciembre, 2005

Luces automáticas

Esto es un Clásico de lo que en la ironía original se llamaba "(se) me ocurre", y que contenía gran cantidad de observaciones chorras y debates sin fundamento sobre las cosas triviales del día a día que se me pegan a la retina como chinches hasta que consiguen abrirse un hueco en esta página. Y aquí estoy, cediendo a las presiones de mi mente delirante y de aquello que clasifico como Grandes Ironías del Mundo Tecnificado.
Me explico: resulta que en los baños del edificio donde trabajo, las luces se encendían como en toda casa del lector: apretar pa rriba = encendido, apretar pa bajo = apagar. Conclusión: que siempre se quedaban encendidas a no ser que alguna alma caritativa las fuera apagando.
El resultado es malísimo para el medio ambiente, la ecología y los contratos de arrendamiento con gastos incluídos. Así que hace unos meses, instalaron unas luces con auto-apagado, como las de los bares. No sé exactamente quien calculó el tiempo de encendido (25 segundos), pero si esa es la media de la població normal para bajarse el pantalón, hacer pis y vestirse; yo soy totalmente retrasada Porque siempre me quedaba a medio abrocharme. Y creo que como yo muchas otras, que empezamos a darle al botoncito con una cierta mala leche. Resultado: todos los botoncitos se trabaron al cabo de un par de meses y ahora están permanentemente encendidos, sin opción de apagado. Genialmente eficaz, maravillosamente irónico.

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