25 marzo, 2009

Edad Prohibida, Torcuato Luca de Tena, 1958

Lo compré sin pensarlo. Quedé tan fascinada por Los renglones torcidos de Dios que no cabía opción de que otro libro del mismo autor fuera malo. Y no lo es. Seamos francos. Está bien construido, bien narrado, es agradable y te engancha, pero no es el otro. Me fallan especialmente los personajes. Me quedan un poco artificiales. Te los explica tanto que no me generan dudas, ni curiosidad. Anastasio el protagonista es plano. Sabes siempre lo que va a hacer.
La grandeza de los renglones era generar dudas al lector, hacerte parte de la historia, hacerte sentir igual de perdido o dudoso que los actores de la comedia, y así, sin explicártelo todo, te hace parte de ello. En Edad prohibida no es así. Parece un ejercicio de nostalgia de la adolescencia del autor, rebosa momentos cursis y ñoños, de esos que cuando uno los vive son maravillosos, pero cuando los cuenta en una novela, en uan canción, en un cuadro, resultan poco relevantes para los demás. No sé si el autor vivió esa fascinación por el niño fuerte y listo que termina mal, pero no me ha convencido el libro. Quizás si no hubiera tenido ningún tipo de expectativas, me hubiera parecido muy bueno, pero viniendo de donde venía.... se deja leer, no es desagradable, pero no entra en mis top 20 (que algún día debería nombrar....)

Etiquetas: