22 febrero, 2009

La casa verde, Mario Vargas Llosa, 1965

difícil de definir y de leer. Definitivamente, no debe leerse como lo he hecho yo: a ratos perdidos, sin continuidad, sin disciplina, ni memoria ni concentración. La casa verde es un libro complicado, de esos que no facilitan la tarea del lector. No de "da" la historia, la tienes que ir extrayendo de un formato intrincado y fascinante. No sé qué me ha parecido este libro. Es la pura verdad. Me ha impresionado el dominio de Vargas Llosa sobre la técnica de la narración: puede contarte un diálogo intercalado con 20 años de diferencia y lo entiendes perfectamente. Te va dando esas pistas pequeñitas, que hacen fácil lo imposible. Me saco el sombrero.
Pero me ha matado un poco la historia. Me la he perdido, cuando en pleno epílogo parecía que todas las piezas encajaban y todos los personajes encontraban su lugar, esa ilusión se ha desvanecido. Es de esos libros que dejo para volver a leer cuando organice de nuevo la lectura en mi vida y me permita leer al menos media hora al día como antes. Hasta entonces me voy a abstener de recomendarlo, a no ser que seáis fans de los ejercicios literarios "raros" y diferentes. Entonces, este es vuestro libro. Es algo así como "rayuela" pero fumable e infinitamente más interesante.

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