03 noviembre, 2006

El Paraiso en la otra esquina, Mario Vargas Llosa, 2003

Buenísimo, me lo he tragado casi de un tirón. Increíble la historia de Paul Gaguin y de su abuela Flora Tristán (me quedo con el action item pendiente, de comprobar si es verdad ese parentesco). De cómo ambos, juegan en la vida real, a ese juego supuestamente peruano de preguntar a los niños de un círculo si el Paraíso es ahí. Ellos te contestan que no, que es en otra esquina (precioso título poético, me encanta). Supongo que en el fondo, todos jugamos a buscar el paraíso en este mundo que nos ha tocado vivir. Alguno lo encuentran en la primera esquina, otros encuentra un mundo circularmente regular, sin esquina ninguna donde esté escondido el paraíso. Terrible ese encierro, uno debe siempre buscar al menos una esquina pequeñita, con un poquito de polvo acumulado, para poder subirse y tener una prespectiva distinta.
Recomendado a salvajes encerrados en sí mismo, a seres que se sientan ahogados en este mundo e incomprendidos en sus ansias de ser distintos y cambiar el mundo. No puedo dejar de adorar a esa Flora, con tanta pasión que pensó que podría liberar a la clase obrera y obtener la igualdad de las mujeres ella sola en unos pocos años. Cuanta ilusión desperdiciada! Flora, seguimos tu lucha.

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