28 septiembre, 2007

Justicia Internacional

DIOS, como me indignan ciertas "cosillas" de este mundo. Esta mañana en las noticias he visto que el Tribunal Penal Internacional ha declarado culpables a 2 ex-mandos del ejército serbio (o croata... ahora me ha entrado la duda... me informo directamente en el periódico:

La matanza de 194 civiles, militares y simples heridos o enfermos que buscaron refugio en 1991 en el hospital general de la ciudad croata de Vukovar ha pasado a los anales de la guerra de los Balcanes como uno de sus capítulos más sangrientos.

Sabéis cuál ha sido la condena? 20 años de cárcel. Pero CÓMO es posible?? O sea, que un terrorista de la ETA que mata a 20 personas le condenan a 3600 años de cárcel (aunque luego cumpla 20, eso es otra historia) y a un terrorista que practica limpieza étnica le condenan a 20 años por 194 muertes??? Y a eso le llaman "justicia!? Sale bastante barato, creo. Vas, te cargas a 200 tíos que te caigan mal (siempre fuera de tus fronteras) y plis plas en unos poquitos años fuera de la cárcel. Me parece surrealista, e indignante. el TPI no debería servir como modelo de castigo para evitar que eso vuelva a suceder? Al menos yo creo que esa es una de sus funciones. Que los potenciales masacrantes sepan que sus acciones no quedan impunes, pero ahora resulta que el mensaje que dan es exactamente el contrario: mejor que te juzgue el TPI que el juez de la esquina de tu país. Es decir, que sale más a cuenta montar una guerra y dedicarte a la limpieza étnica a machetazo si hace falta que apuntarte a la ETA. No es un buen mensaje que tranmitir a los asesinos. No me gusta.

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1 Comments:

At 28 septiembre, 2007 12:03, Blogger El Coronel Marmota said...

Ciertamente, Jefa, lo del TPI sería para reír si no fuera tan grave. Démonos cuenta además que han hecho falta 16 años para juzgar a estos tipejos. El juicio a un criminal de guerra nazi importante que más tardó fue el de Eichmann, exactamente también 16 años, en el '61, y eso porque hubo que "ir a buscarlo" a Argentina. Por lo demás, en 1950 todos los criminales importantes ya habían sido juzgados. Y por cierto, todos los verdaderamente culpables de atrocidades terminaron colgando de una soga. No estaría de más que el TPI hiciera memoria.

Para el recuerdo, una poesía que escribió una niña evacuada de Vukovar:

MAS allá de siete colinas, más allá de siete montañas
en Eslavonia, en Vukovar,
una muñeca llora.
No puede oírsele, porque está muy lejos
no puede vérsele, porque está muy lejos.
Pero yo oigo, esta muñeca es mía, es ella quien llora.
Escóndete, mi muñeca,
para que no te capturen como rehén,
escóndete entre los pedazos de mi libro,
escóndete.

 

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